Blefaroplastia

Mejora tu mirada

El aspecto de una persona es fundamental, es su carta de presentación, y no se trata únicamente de rejuvenecer sino también de mejorar la mirada y en definitiva la imagen que se desea tener para uno mismo y para los demás.

La blefaroplastia es el tratamiento quirúrgico de remodelación que realizamos sobre los tejidos perioculares, es decir, los párpados y cejas cuando por causa del envejecimiento fundamentalmente, se produce un aumento de la laxitud de los tejidos y como consecuencia un exceso de piel llamado “dermatocalasia”, descolgamiento de los tejidos y herniación de la grasa periorbitaria en algunas ocasiones. En otros casos, podemos encontrarnos alteraciones palpebrales por causas traumáticas o parálisis del Nervio Facial que provocan caídas o “Ptosis” del párpado o incluso rasgos familiares determinados que se acentúan con los años y que sean susceptibles de cirugías de este tipo.

Tratamiento de blefaroplastia

El motivo de la realización de la blefaroplastia y en determinados casos cejaplastia suele ser fundamentalmente estético aunque en ocasiones existan alteraciones en la función como hemos comentado anteriormente que tengan que ser corregidas mediante estas técnicas quirúrgicas.

Pero también es importante que los pacientes comprendan que no se puede extirpar más piel ni grasa de la necesaria. Los párpados tienen una función protectora del globo ocular y no podemos permitir que queden expuestos por una resección de piel mayor de la necesaria ya que provocaremos alteraciones en la superficie ocular que en ocasiones de podrían ser de importancia o gravedad. La salud de la superficie ocular depende de un delicado equilibrio en el que juegan un papel fundamental los párpados con sus pestañas y la producción lagrimal. Por otro lado, eliminar más piel de la necesaria podría provocar un descenso de la ceja nada deseable si lo que queremos conseguir es una imagen más saludable.

¿Cómo se hace el tratamiento?

En la blefaroplastia tanto superior como inferior realizamos unas incisiones invisibles porque aprovechamos los pliegues naturales o bien accedemos por la zona interna de los párpados (incisión conjuntival) para que después no se noten.

En la blefaroplastia superior se elimina piel, en ocasiones músculo orbicular y si es necesario grasa, aunque nunca en exceso para no permitir resultados indeseables como podría ser el de un aspecto cadavérico.

En la blefaroplastia inferior se suele hacer una resección de grasa o bien redistribución de la misma para eliminar las bolsas y suavizar los pliegues malar y nasoyugal. Es bastante infrecuente que exista exceso de piel en los párpados inferiores. Normalmente se produce herniación de los paquetes grasos y un aumento de laxitud en el musculo orbicular e incluso descolgamiento de la mejilla.

La ceja plastia se realizará cuando haya un descenso marcado de la ceja, sobre todo de la zona más externa llamada cola. En ocasiones habrá de retirarse una pequeña porción de piel.

Todas estas técnicas se realizan con anestesia local y en ocasiones leve sedación, duran entre media y una hora dependiendo de si se operan dos o los cuatro párpados a la vez.

Post-tratamiento y resultados

Son cirugías ambulatorias en todos los casos y el tratamiento domiciliario consistirá generalmente en antiinflamatorios vía oral, colirios y ungüentos oftálmicos según los casos. Los puntos se suelen retirar a los 7-10 días dependiendo de los casos y la reincorporación laboral no suele demorarse más de una semana o 10 días.

Los resultados suelen ser muy satisfactorios, aunque es crucial que las expectativas del paciente sean adecuadas.